contra las cuerdas

Y las estrellas del año son...

Las 1.478 estrellitas que la revista "Rolling Stone" versión argentina desparramó en sus páginas de discos, lo que da un promedio de TRES ESTRELLAS Y MEDIA por compacto. Una lección para los quejosos, los críticos, los escépticos. Acá está la mejor razón para brindar: TODOS LOS DISCOS DEL 2003 FUERON MUY BUENOS!!

Llegamos contra las cuerdas! Balance 2003

DISCOS DEL AÑO:

-“Dear Catastrophe Waitress” – Belle and Sebastian: Elliott Smith puede descansar tranquilo. Los Belle and Sebastian volvieron a convertirse en esos increíbles guardianes de las canciones sensibles.

-“Elephant” – White Stripes: la única banda de la movida retro que no parece sacada de una fotocopiadora. Vas a escuchar este disco dentro de 10 años y va a sonar tan atemporal como ahora, aunque tal vez ya nadie recuerde a los White Stripes.

-“Rock and roll” – Ryan Adams: esto es pasar de ser un songwriter de moda a un songwriter de toda la vida. Divertido y ácido en un ambiente cada vez más solemne y aburrido.

-“Stereo” – Paul Westerberg: se editó en el 2002 pero acá llegó milagrosamente este año. Westerberg nunca fue un songwriter de moda ni lo será. Los Replacements no se hicieron famosos, se hizo famoso REM, y bué. “Stereo” es como un resumen de lo mejor de Westerberg: un CD de baladas y otro de rock de garage (que no suena retro!!!). Casi
que con este doble ni se necesitaba otro disco en el año.

-“Want One” – Rufus Wainwright: no está al nivel de los anteriores pero sigue siendo Rufus Wainwright, esa extraña, extrañísima conexión entre los discos de Tim Buckley y las canciones de Broadway. Bizarra banda sonora de la vida.

-“Think Tank” – Blur: He aquí a una banda que perdió todo (el guitarrista, los hits, el éxito, el prestigio, la escena) pero nunca se olvidó de la música. Cansados, vencidos, quemados, brillantes.

- “Echoes” – The Rapture: Ah! Volvió el rock para bailar y eso es lo importante. Sí, la voz del cantante molesta con su tonito Robert Smith, y a quién le importa si está bailando. También hay temas para la resaca alter-hour.


LO MEJOR:
- La circulación de música por Internet.
- El crecimiento de los blogs como espacios alternativos.
- Siguen sin aparecer los Redondos.
- Los Stones en vivo que no vimos.
- El recital de Bryan Ferry en el Gran Rex.

LO PEOR:
- La muerte de Elliott Smith.
- Charly García.
- Fito Páez.
- La muerte de María Gabriela Epumer.
- Los insultos de Spinetta a Pablo Schanton.
- Los periodistas y críticos obsecuentes de García y Spinetta.
- La caída total de las revistas de rock masivas y de los “suplementos juveniles”.


REVELACIONES TARDIAS: Los Natas y Fantasmagoria.

UN DISCO DE ACA A LA VUELTA: “Misterios de la energía”- Juani.

EL FRACASO: “Hail To The Thief” (Radiohead): Thom Yorke leyó medio libro de Chomsky y salió a hablar de las pestes del capitalismo, Bush, la guerra, las Naciones
Unidas y el fin del mundo. Es comprensible. En realidad no había nada para hablar sobre este disco.

EL BOCHORNO: La vuelta de Leo García: decir la palabra “pop” cada dos segundos, tirar lo de “la confesión gay”, seguir hablando de Gilda y Madonna, hacerse el amigo de las Bandana, aparecer en la publicidad de Quilmes, ser el más mencionado en el Sí, dar notas a “Claro” o “Semanario” (con títulos como “De chico me decían que era rarito”), ir a comer con Mirtha Legrand… nada pudo hacer que Leo García vendiera más discos o se convirtiera en el “fenómeno pop” que muchos esperaban desde aquella época en que posó en la tapa de Clarín Espectáculos con el “padrino” Gustavo Cerati. Y del disco… bueno, todo lo anterior pasa porque tampoco hay nada para decir del disco.

ESTAFAS, ENGAÑOS, FIASCOS Y OTROS DELITOS MENORES:

-Miranda / Adicta: Glam de supermercado Carrefour en superoferta (y los tipos peor maquillados desde el cantante de The Human League).
-“Infame” – Babasónicos: Calentura de porno del canal Blue + histeria de “Montaña rusa” + refritanga de discos anteriores.
-“Caen del cielo” – Juan Manuel Godoy: un disco grabado “accidentalmente” con un Casio de juguete que se supone que es “lúdico”, “experimental”, “lo-fi” y…. “punk”.
-“EP nro. 1” – Phillipe Etaro: Me quedé con el package, todas las cartulinitas, pero al disco lo tiré. Copyout.


TOPS FIVE:

FOTOCOPIADORAS:

1)- The Music.
2)- Black Rebel Motorcycle Club.
3)- Kings of Leon.
4)- Yeah, Yeah, Yeahs.
5)- The Strokes.

Sigan hacienda mérito: Interpol, The Coral, The Darkness.

ABURRIDOS:

1)- “Nocturama” – Nick Cave.
2)- “The Raven” – Lou Reed.
3)- “Hail To The Thief” – Radiohead.
4)- “Amateur Night In The Big Top” – Shaun Ryder.
5)- “Blemish” – David Sylvian.


INSOPORTABLEMENTE POLITICAMENTE CORRECTOS:

1)- Thom Yorke.
2)- Michael Stipe.
3)- Chris Martin.
4)- Damon Albarn.
5)- Bono (no podés estar cayendo así!! Te salieron muchos competidores)

Otro más en el círculo de baba?

Y sí, la corte de chupamedias de Fito "Hay que salir al sol" Páez sigue creciendo, y todo sea por quedar bien con todo el mundo. Bueno, eso es lo que hacen en definitiva la mayoría de los rosarinos. Pero mucho más bochornoso es criticarlo en un teatro y después salir a alabarlo en los medios. En la edición de ayer de Rosario/12 aparece Alejandro Simonetto (el "periodista" de espectáculos que está todas las mañanas en Radio 2, con chapa de ser del palo rockero) asegurando que los shows de Páez en El Círculo fueron de lo mejor del 2003.
¿Será el mismo Alejandro Simonetto que en ese show de Páez no paraba de quejarse porque estaba aburrido y pedía por favor "un poco de rock"? ¿Será el mismo que se fue mucho antes de que el interminable recital terminara?
¿No tenemos suficiente con el eje Polimeni-Pauls para seguir agregando gente a la lista?

Sir o no Sir, esa es la cuestión?

-A propósito de la noticia:

David Bowie rechazó la orden de caballero del imperio británico

Londres. - El músico británico David Bowie rechazó recibir una condecoración honorífica de la reina Isabel II por encontrar el acto "retrógrado y clasista". El diario The Sunday Times informó que cerca de 300 británicos famosos y celebridades se negaron a recibir los títulos de OBE (Orden del Imperio británico) o el CBE (Caballero del Imperio británico) en los últimos años, por razones de moral o ética política.

Según dio a conocer la agencia italiana Ansa, la información, que estaba guardada en secreto en oficinas de Whitehall, sede del gobierno británico en Londres, salió hoy a la luz y podría generar mucha controversia ya que muchos de los "detractores" tomaron la decisión en secreto.

Entre los famosos que se negaron a ser distinguidos por la monarca están la cocinera inglesa Nigella Lawson, los escritores JG Ballard, John le Carre, Aldous Huxley y Graham Greene, el artista David Hockney, así como también el director de cine Alfred Hitchcock, quien rechazó ser condecorado en 1962.

- Gracias a la realeza británica, se instauró una nueva categoría de "rebeldes" en el rock: los que aceptan títulos reales y los que no. Ya estoy escuchando decir "viste? David Bowie no es como Mick Jagger". Tantos años de actos y actitudes para terminar reduciendo todo a tener o no tener una medallita. Tristísimo.



Guía del consumidor (compilados navideños)

Como advertimos que para algunos es demasiado berreta regalar un CDR con fotocopia (o sin fotocopia) aprovechamos la clásica ola de compilados navideños para repasar lo bueno, lo feo y lo malo de algunas bandas de que nos hicieron felices o nos torturaron (según el caso) en los últimos años.

PRIMAL SCREAM (“Dirty Hits”): Este año se da el caso de dos compilados mellizos: este y el de los Chemical Brothers. Una banda de rock que te hace bailar y un par de DJs que te hacen rockear. Los ponés en cualquier fiesta y te olvidás. El tracklisting es otra historia. ¿Querés algún tema de los dos primeros discos de Primal Scream? Olvidate. Ya todos parecen dar por sentado que la historia de la banda empieza con “Screamadelica” (91). Y de los Primal que eran una de las poquísimas bandas herederas de los mejores Stones (circa 66-72) ya no quedan ni rastros en un compilado. De todas formas hay una inmejorable selección del pastiche de “Vanishing Point”, algo del olvidado “Give Out But Don’t Give Up” y bombas y bombitas de “XTRMNTR” y el inesperado “Evil Heat” (Gracias Kevin Shields).

CHEMICAL BROTHERS (“Singles 93-03”): Viene con temas nuevos y todo. Pero es un mal negocio. Incluye esas canciones donde se hacen los britpoperos que habría que borrarlas del mapa. Y además se pierde el concepto sonoro único que manejaron los tipos en los dos primeros discos. La única opción: conseguir esos discos, “Exit Planet Dust” y “Dig Your Own Hole”, y escuchar en ese orden.

SUEDE (“Singles”): Caso mellizo del anterior. Nadie va a quejarse por escuchar una colección de canciones de Suede. Pero es un mal negocio. La mejor opción: conseguir los dos primeros discos, “Suede” y “Dog Man Star”, irremplazables. De yapa: el compilado de lados B “Sci-Fi Lullabies”.

NO DOUBT (“The Singles 1992-2003”): Lo único que tendría que haber salido a la luz de No Doubt llegó recién ahora: un puñado de hits. Banda nacida para el compilado. Los discos full son una tortura y el grupo en vivo es un fiasco (recordar Ferro 1997 /teloneros de Bowie, una pesadilla). Acá están “Ex Girlfriend”, “Simple Kind Of Life”, “Running” y hasta una refrescada versión del incinerado “It’s My Life” de Talk Talk.

STONE TEMPLE PILOTS (“Thank You”): Compilado mellizo del anterior. Banda nacida para el compilado. ¿Quién fue el héroe que se bancó la discografía entera? Hermoso el arte de tapa, y así y todo es un mal negocio. Armá tu propio compilado con “Plush”, “Big Band Baby”, “Lady Picture Show”, “Trippin’ On A Hole In A Paper Heart” (ese solo!! quemadísimo) y la incomparable y grasulienta “Interstate Love Song”. Lo recaudado pagará la próxima fianza de Scott Weiland.

REM: Y vamos descendiendo a los infiernos. ¿Quién quiere escuchar otra vez “Losing My Religion”? Cuando la tocaron en el Campo de Polo no lo pude soportar, me fui a comer una hamburguesa y después no tenía ni ganas de volver al recital. El compilado reúne lo mejor de REM desde 1988 hasta este año, o sea, casi nada. Hay bodrios de “Out Of Time” y “Up”, algún rescate de “Automatic…” y “New Adventures…”. Lo mejor de “Monster” ni está. El peor compilado en años.

RED HOT CHILI PEPPERS (“Greatest Hits”): Caso mellizo del anterior. ¿Quién quiere escuchar otra vez “Californication”? Una copia trucha de “Blood Sugar Sex Magik” y a otra cosa. ¿Será un castigo porque no vinieron este año? ¿O vinieron?

Yo vengo a ofrecer mi corazón

Por el cumple? No. De onda? Menos. 30 mil pesos cobró Fito Páez por "cantar" en la fiesta aniversario de Rosario Central. Un par de temas, camiseta y chau, chau, chau, chau, chau, chauuuuuuuuuu!!!

Rescatando al soldado Ryan

Blasfemia total!!! Un songwriter norteamericano con los peores antecedentes posibles revuelca por el fango de su rock and roll a los Smiths, U2, Nirvana, los Strokes y hasta Joy Division. Pero no todo es lo que parece. Una pequeña introducción al único disco auténticamente “infame” del año: “Rock N Roll”, de Ryan Adams.

A Ryan Adams lo arruinaron. Ryan Adams es el típico natural born songwriter, un pibe que hubiese encontrado canciones en cualquier lado: en una banda punk de California, con un grupo de productores de R&B, en cualquier pastiche electroclash, en lo que sea. Y no importaba si había nacido en Jamaica, Manchester o Bahía. Pero lo descubrieron y empezó a venir lo de la “revelación” de encuesta de fin de año, lo del nuevo Dylan, el nuevo Cobain, el mejor desde… y todas esas expresiones que te convierten en una gloria olvidada en menos de tres o cuatro años. Para colmo, acá empezó a asomar con “Gold”, un disco que en la tapa mostraba la bandera de los Estados Unidos. Casi nadie se tomó la molestia de bajarlo o comprarlo.
Pero eso no es todo, el perfil Ryan Adams que definió él mismo con gran ayuda de los medios no hizo más que sumar puntos para detestarlo. Acá va el Top Ten:

1)- Su tema “New York, New York”, del disco “Gold”, fue promocionado como un himno post 11 de septiembre.
2)- Es el típico caso del cantautor prolífico que quiere sacar discos a cada rato y se pelea con la discográfica por eso.
3)- Es el típico caso del que reconoce sus influencias pero jura haber escuchado y comprado otra cosa (dice que le gustaban Black Flag y Husker Du, por ejemplo, pero compraba discos de Galaxie 500).
4)- Admira a Alanis Morrisette.
5)- Se enamora de actrices de Hollywood.
6)- Tiene todo tipo de bandas fantasmas: la country, la punkie, la grungie, etc.
7)- A veces sube al escenario completamente borracho.
8)- Rodrigo Fresán le dedicó una página en el Radar (esta semana ya lo cambió por otra figurita: Josh Rouse).
9)- Es amigote de los Gallagher y otras glorias desgastadas del rock inglés.
10)- El arte de tapa de “Gold” incluye ese tipo de estética retro con bandeja de vinilos, vinilos y pantalones Oxford.

¿Más? No, suficiente. Pero este año Ryan Adams, después de discos entrañables de canciones inolvidables y toda esa perorata, apareció con “Rock N Roll”, un disco que salió como de rebote por todos los quilombos que tiene con la gente del sello Lost Highway.
Aparentemente en el disco hay puras citas, parodia y homenajes (canciones con nombres de otras, etc). Pero empiezan a correr los temas y no. No hay homenaje, ni mimetización, ni parodia ni actualización de ningún sonido. En la tierra de los clones y grandes citadores (desde los Yeah, Yeah, Yeah hasta Black Rebel Motorcycle Club), “Rock N Roll” es una blasfemia, una risa cruel, una patada. Una falta de respeto desde el lugar menos esperado.
Ryan Adams subvierte la esencia y el sonido de gran parte del rock del punk hasta acá (post punk inglés, indie pop inglés, noise, grunge, retro NY) y lo arrastra sin drama a un sonido y una lírica que le son ajenos y ni que hablar que políticamente incorrectos: el rock americano que va desde Grateful Dead hasta los New York Dolls, desde Hüsker Dü hasta Replacements. Y así quedan los Smiths en “Anybody Wanna Take Me Home”, los Strokes en la burlona “This Is It”, los T. Rex en “Shallow”, los Stooges en “1974”, los Jesus and Mary Chain en “Luminol”, U2 en “So Alive”, Nirvana en “Note to Self: Don’t Die” y la mejor de todas: “She’s Lost Total Control”, Joy Division en versión autopista americana, y Ryan Adams se va al carajo en el estribillo, con un falsete que parece del cantante de Coldplay (menos mal que Ian Curtis y Martin Hannett ya no están entre nosotros, porque hubiesen vuelto a morir del espanto).
Después hay temas tipo Americana (la balada “Rock N Roll”, otra ironía, o “Burning Photographs”) que ya corren totalmente por cuenta de Ryan Adams. Tanto “Rock N Roll” como el EP “Love Is Hell”, también editado este año y producido por el otrora colaborador de los Smiths John Porter, están dando vueltas en la red.

Gremiales: Desempleados del rock

Teniendo en cuenta que una vez el Indio Solari se refirió a los miembros de la troupe ricotera como “empleados”, estamos en condiciones de afirmar que el rock se ha empezado a cobrar sus primeros “desempleados”. Dado que los compañeros no han recibido ni telegrama de despido ni la indemnización correspondiente, a pesar de la próspera industria del rock independiente, se vieron obligados a dedicarse a otras tareas, desde las más dignas hasta las más insólitas, a saber:

-Semilla Bucciarelli: aparece en el nuevo disco de Divididos, “Vivo acá”. En los créditos lo acompaña otro ex “empleado” de la empresa: Tito Fargo. También empezó a exponer como artista plástico.

-Walter Sidotti: está al frente de su banda “La Favorita” (“Hay que hacerle una nota”, te dicen los managers y otros empleados varios. “Es el grupo del batero de los Redondos”).

-Rocambole: hizo el arte de tapa del nuevo disco de Attaque 77, “Antihumano” (ya no daba para más lo de “exponer las obras”).

Suerte a todos!!